martes, 27 de enero de 2015

El río de la ciudad natal. Jorge Carrera Andrade

En 1976 el poeta ecuatoriano Jorge Carrera Andrade habla del Machangara de esta manera: 

"Machángara de menta: eres mi río". 


Apenas 40 años atrás los olores del río eran de menta y de las especies que allí habitan, ¿ como regresamos a esto ?, es vital para al vida de la capital, ¿que debemos hacer como ciudadanos?.

Mas abajo poema también lo describe así: 


Sólo estamos de paso… ¿para dónde?
Dime, río Machángara sapiente:
¿Tanto esfuerzo y labor son para nada?
Seguir quiero tu ejemplo transparente.



de nuevo es espeluznante pensar como en tan solo 40 años de crecimiento y "desarrollo" el ejemplo transparente del Machangara fue ultrajado por la urbanización y el hombre para quitarle toda su honra y convertirlo en una mancha oscura en la profundidad de las quebradas. "Solo estamos de paso... ¿ para donde ?"




El río de la ciudad natal


«Machángara de menta: eres mi río.
Atraviesas mi pecho y no los prados.
Aguas de historia y lágrimas de siglos,
Mortaja de crepúsculos ahogados.

Entre casas y huertas pasajero
Caminas y murmuras entre dientes.
Tus monedas escondes en las guijas
Y te vas a dormir bajo los puentes.
(…)

¿Van los conquistadores por el río?
Los penachos ondean en la bruma:
¡Oh verde infantería de carrizos,
morriones de cristal, cotas de espuma!
(…)

Sólo estamos de paso… ¿para dónde?
Dime, río Machángara sapiente:
¿Tanto esfuerzo y labor son para nada?
Seguir quiero tu ejemplo transparente.
(…)

Todos los astros y constelaciones
De los dos hemisferios: ¡oh tesoro
Para el hombre sediento que interroga
Bajo las luces del celeste coro!»


Tomado de Jorge Carrera Andrade, Obra Poética Completa, Quito, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1976, pp. 154-155.

jueves, 22 de enero de 2015

El Río San Pedro

El río San Pedro bajando desde el sur de la ciudad, desde la periferia, rió que carga con el 5% de las aguas residuales de la ciudad, atraviesa el valle de Cumbaya para luego unirse con el río Machangara y luego con el Guayllabamba. Gran quebrada a la altura de puente del Arenal y Tumbaco, llena de flores y arboles andinos. El agua que baja es el cauce tóxico que nos aleja y nos niega las quebradas, hay que sanar los ríos y pasear por las quebradas, recuperar el valor de su ecosistema para entender nuestro territorio desde esos pliegues milenarios que ha abierto el agua.